How to write:
1. Imagine all the people who think your writing sucks.
2. Realize that they're not reading you.
3. Write.
Entiendo que no doy la impresión de ser una persona especialmente interesante. La mayor parte del tiempo prefiero escuchar que compartir, interiorizar que exteriorizar. Prefiero ser precisa que oportuna, porque siempre me ha dado la impresión de que mi cerebro y mi boca no están lo suficientemente sincronizados para funcionar adecuadamente en tiempo real. No dudo que haya quien me haya descrito en alguna ocasión como tartamuda.
Es quien soy. Prefiero pensar las cosas antes de decirlas, porque como muchas otras cosas, las palabras no siempre son susceptibles de ser dispersadas por el viento, especialmente cuando acaban de salir de la boca de alguien. Me gusta elegir cuidadosamente mis palabras, sentir que las acomodo y juego con ellas porque quiero y porque puedo. Me gusta creer que cuando tengo algo que decir, lo que diga será más que ruido blanco, o un remedio contra el silencio. Me gusta pensar que vale la pena decir algo cuando hay alguien que tiene interés en escucharlo.
Y es que no sé si la gente está consciente de que es posible notar el momento exacto en el que deja de prestar atención y comienza a pensar en otra cosa, nada más asintiendo con la cabeza. Ése es el momento en el que una narración, cualquiera que sea, pierde su chispa instantáneamente.
Por eso escribo, aquí y en todos los demás lugares donde lo hago. Escribo para mí, ahorita para aclarar mis pensamientos, y más adelante para recordarme a mí misma al regresar a mis textos. Sé que tengo al menos a una audiencia cautiva de un integrante. Todo lo demás se acomoda por nivel de introspección en distintos lugares (acomodados de más a menos públicos, según sea el caso), y se deja al alcance de quien pudiera querer asomarse, según su grado de cercanía.
Esa parte es importante: se deja al alcance de los posibles lectores. Se comparte. Pero de nadie se espera nada más. No se exige participación, no se demanda retroalimentación... porque a nadie corresponde la obligación de leer cuanta tarugada me pasa por la mente, trátese de sueños estelarizados por Beto Cuevas, de largas disertaciones sobre las relaciones humanas, de recetas de cocinas, con o sin fotos que las acompañen, de narraciones de eventos y personas que para nadie tienen el significado que para quien decide registrarlas. Se comparte porque se quiere, y a pesar de que no hay nada como saber que algo que dijiste tocó a alguien de alguna manera, prefiero un blog de silencios a uno de comentarios inanes.
Escribir para sí es mucho mejor que hablar para nadie, a fin de cuentas, y mejor que escribir pensando que hay un público por "complacer". Escribir para los protagonistas, y no para los extras. Pensar antes de hablar. Interiorizar antes que exteriorizar. Hablar poco, pero hacer que cuente. Aparentar... lo que sea que uno aparente, pero tener confianza en lo que uno es.
Eso es lo que yo soy, y lo comparto... y ya.
"If human beings don't keep exercising their lips, he thought,
their mouths probably seize up. After a few months' consideration and observation
he abandoned this theory in favor of a new one. If they don't keep exercising their lips, he thought, their brains start working."
their mouths probably seize up. After a few months' consideration and observation
he abandoned this theory in favor of a new one. If they don't keep exercising their lips, he thought, their brains start working."
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