20 de abril de 2008

Papá y cómo elegir cualquier auto en el mundo

Rico no es el que más tiene, sino el que menos necesita.

I don't know where it is, but I know I'm going...

"Estoy en un lugar en el que nunca, literalmente nunca, soñé estar. En la playita del hotel en Oeiras, desde aquí veo Lisboa, el puente, el Cristo Rey... Hace un momento unas gaviotitas europeas se acercaron a mí como si nada. La arena esta oscura, y las piedras de río la llenan de color..."

Cada cierto tiempo trato de explicarme a mí misma el amor que tengo por Portugal. Estuve ahí menos de 5 días, de los cuales al menos uno entero pasé bajo un puente cerca del acceso al estadio José Alvalade (en Europa bajo un puente... ¿Cliché much?). Y sin embargo, puedo ver las fotos y releer las notas y repasar los recuerdos una y otra vez, y la sola mención del país me hace sonreir y pensar en la belleza de todo lo que ahí vi.

Y creo que no es solo el mar helado, o las playas rocosas, o el clima maravilloso ni los castillos y las construcciones interesantes... Sino más bien que Portugal fue un refugio después de las terribles experiencias que tuve con la "amabilidad" de la madre patria (ah, las historias que KQ y yo podríamos contar...). Inclusive de regreso en Madrid, los portugueses eran para mí una boya de sensatez y espíritu humano. ¿Suena exagerado? Durante la barbarie que fue el Vicente Calderón, no lo era. Aún viéndolo en perspectiva me lo sigue pareciendo.

Así que aquí sigo, lejos pero al mismo tiempo cerca, orgullosa de la "nacionalidad honoraria" que amablemente un grupo de las mejores personas que he conocido en mi vida compartieron conmigo, soñando con volver, con hablar su idioma como ellos, y de volver a estar sentada en una roca viendo el mar azul, azul, de verdad azul.

15 de abril de 2008

Buenas noticias // Malas noticias

La buena noticia es que después de vaciar la mitad de mi closet, y después de varios meses años de ausencia, MiracleDrug apareció.

La mala es que el DVD de Moulin Rouge! y la funda de mi iPod, durante la búsqueda de los cuales vacié la mitad de mi closet, no han aparecido, y si la desaparición de MD es algún indicio, no voy a aguantar año y medio sin DVD ni funda.

Por otro lado, también encontré $200 en una bolsa que hacía años que no usaba, así que en las célebres palabras de Homero Simpson, woohoo!

7 de abril de 2008

In an Absolut World (I y II)

Curioso que nunca oí sobre esto en este país, pero aparentemente a los compañeros estadounidenses el siguiente anuncio no les pareció gracioso:


Este anuncio, creado por Teran/TBWA, tuvo más impacto en la blogósfera norteamericana que en el orgullo nacional mexicano como era su objetivo, porque más tardó Absolut en publicar la campaña en nuestro país que los vecinos del norte en prometer boicotear la marca. Una encuesta contenida en un artículo al respecto en la versión electrónica del L.A. Times (que igual, hay que ver a quién le preguntan) muestra que el 64% de los votantes consideraron el anuncio ofensivo.

Ni tarda ni perezosa, Absolut Spirits publicó una disculpa y se comprometió a retirar el anuncio:

During the weekend we have received several comments on the ad published in Mexico. We acknowledge the reactions and debate and want to apologize for the concerns this ad caused. We are truly sorry and understand that the ad has offended several persons. This was not our intention. The ad has been withdrawn as of Friday April 4th and will not be used in the future.

In no way was the ad meant to offend or disparage, or advocate an altering of borders, lend support to any anti-American sentiment, or to reflect immigration issues.

To ensure that we avoid future similar mistakes, we are adjusting our internal advertising approval process for ads that are developed in local markets.

This is a genuine and sincere apology,

By Paula Eriksson, VP Corporate Communications, V&S Absolut Spirits


Este es el momento de profundizar.

Entiendo la indignación estadounidense causada por este anuncio. Como comenté con una observadora sumamente parcial, es cierto que hinchar el orgullo nacional a costa del orgullo nacional de otra persona es no sólo de mal gusto, sino además una decisión decididamente estúpida, puesto que en esta era de la comunicación es imposible hacer una declaración sobre cualquier cosa/persona/país/idea/sustantivo sin que ésta llegue a sus oídos; si no, basta preguntarle su opinión a Tiziano Ferro, Mónica Naranjo, y otras personas que han abierto la boca lo suficiente para atorarse ahí la metida de pata.

Y de nuevo recalco que entiendo la indignación, porque como la antes mencionada observadora comentó, si el anuncio para EE.UU. hubiera sido algo tan sencillo como la frontera marcada por un muro con alambre de púas, habríamos tenido el mismo problema exactamente, con los papeles invertidos (al revés volteado, como diría mi abuelito). A diferencia del debate sobre la estampilla conmemorativa de Memín Pingüín (y la del Negrito Sandía, sobre la cual gracias al cielo parecen no haberse enterado, porque ésa sí estaba rebosante de estereotipos que llevan ya años censurados en EE.UU.), en este caso el orgullo nacional debió sacrificarse a beneficio del respeto del orgullo de nuestros vecinitos favoritos. Aunque sean nuestros vecinitos favoritos.

Por otro lado... La gran mayoría del país del norte debería sentarse a pensar un largo rato y cuestionar su propia actitud frente a las representaciones que tiende a hacer y a hacerse de los demás países, y de verdad preguntarse (y responderse) si algunas de ellas no resultan tan ofensivas para los mismos como ésta lo fue para ellos. En otras palabras, EE.UU., pregúntense si no pecarán de llevarse sin aguantarse. Vean este video, lean este libro, y ajusten su actitud si lo consideran necesario. Si no, pues ya ni modo.

El otro aspecto de esta noticia que me llama la atención es la actitud estadounidense, que ya antes describí como ganadora. Regresemos al ejemplo del Absolut World de nuestros vecinos. ¿Qué habrían hecho los mexicanos? ¿Habría habido un boicot a Absolut? ¿Habría habido cartas expresando enojo e indignación? Emails e interminables forwards, evidentemente sí, porque para eso nos pintamos solos. Pero en realidad, ¿cuánta gente habría tomado acción al respecto?

Los estadounidenses tardaron menos de una semana en retirar una campaña publicitaria que sin duda costó mucho dinero, despedir a un departamento entero de diseño y cambiar las políticas sobre publicidad internacional de la tercera potencia comercial de alcohol en el mundo. En una semana.

¿Y nosotros?

* * *

Para leer más al respecto y hacerse añicos el hígado ante la trágica realidad de que la gente ignorante que existe en el mundo es en realidad verdaderamente ignorante, haz click aquí.

(Tururú tururú tururú, Officer Acevedo).