4 de junio de 2009

Es otra vez esa época del año

Y mi comentario editorial comienza en palabras de Amy Winehouse:



Hay mil maneras de perder votos. Yo diría que en mi caso, la principal es el uso de carteleras móviles y autos de sonido, especialmente si van tocando un jingle que suena indiscutiblemente populachero. Lo siento. Mi inteligencia se siente insultada por el hecho de que un individuo cualquiera sostenga que quiere mejorar mi calidad de vida, y con tal de ser elegido para tal cargo empeore mi calidad de vida aumentando innecesariamente el tráfico y la contaminación (atmosférica y sonora) en la ciudad que pretende representar.

Por otro lado, el siguiente mensaje fue publicado en el foro mexicano de Kiva, una asociación prestadora de microcréditos a pequeños empresarios en países en desarrollo:

Para todos los Mexicanos, en plena epoca electoral tenemos que retomar nuestro pais. Esta secuestrado por los politicos, si estas en contra de sus abusos y corrupcion unete a la revolucion2009.

Porta un moño gris y ANULA tu voto.
Cambia al pais desde adentro.

revolucion2009.wordpress.com
(tambien en Facebook y Twitter)

Posted by
Jun 4, 2009 - 9:53 am PDT



Díganlo conmigo:



Increíble. In-cre-í-ble. ¿ESO es su idea de resistencia pacífica? Porque eso dice en el link a WordPress que proveen. De verdad quisiera mantener este texto profesional, así que de la manera más educada posible expreso por este medio mi solicitud de que alguien me explique qué rayos pretenden obtener cubriendo al país de moños grises y anulando la única forma de expresión que cuenta en este país.

¿Qué, entonces el chiste es regalarle la elección a los afiliados? Porque el que tiene un partido tatuado en el pecho, el que vota por ese partido sin pensar en lo que ese partido propone o dispone, en la preparación de su candidato, y mucho menos en el bienestar del país (ya que ésa es normalmente la última de las preocupaciones de quienes tienen agendas partidistas). ¿Eso es lo que pretende este "movimiento" para "retomar" al país? ¿Regalárselo a quien tenga para comprar más votos de los que lo catafixian por una torta y un refresco?

¿Y si, en vez de colgarnos adornos cual árboles navideños, nos involucráramos en las elecciones, nos informáramos sobre las trayectorias y propuestas de los diferentes candidatos y las plataformas de sus partidos? ¿Y si en lugar de vestirnos de rojo, de azul o de amarillo nos vistiéramos de mexicanos y presionáramos a nuestros representantes a representarnos? ¿Y si nos tomáramos la molestia de saber quiénes son nuestros diputados, senadores, etc., y de qué manera desempeñan el trabajo que tanto cobran por hacer, en vez de ir a dibujar palomitas en las boletas que de todas maneras nos cuestan? ¿Y si nos aseguráramos de que los candidatos cumplan sus promesas una vez electos, y no se desaparecieran después de hacer de nuestras ciudades un cochinero de propaganda?

No, para qué. Mejor nos colgamos unas agujetas sucias y vemos si esa gente que "tiene secuestrado" al país se siente tan ofendida por nuestra desaprobación que decide cambiar por sí misma.

¿Cambiemos al país desde adentro? No. Que el país se cambie desde adentro a ver cómo, porque mi papel en esta obra termina el 5 de julio cuando el moño, junto con unas cuantas toneladas de material proselitista, acabe en la basura sin haber servido ningún propósito más que el de darnos una falsa sensación de autorrealización por medio de lo que no puedo llamar más que pseudo-activismo.

Debería darles vergüenza.